La presidenta que ocupa una de las plazas del Poder Ejecutivo, doctora Cristina Fernández, partió en misión oficial a una reunión de la OIT en Ginebra. No por el nombre de la ciudad, va a disfrutar la compañía del señor Hugo Moyano, a la sazón secretario General de la CGT, el sindicato de los sindicalistas, y con bastante ganas de tirarse a la pileta en las presidenciales del 2011. Pero con lo largos que son los viajes en avión, los diarios que se acaban enseguida y demás, van a tener tiempo de charlar un ratito sobre algo que al camionero lo tiene caliente como mono con tricota: los fondos de las Obras Sociales. Un plato fuerte por cómo aumentando las cosas, la guita no alcanza para nada, las minas se ponen cada vez más pesadas cuando la ven a la presi la carteras, valijas y aritos que se pone, papito, yo quiero igual, diversificar la producción, no hay como el emprendimiento privado. Algunos memoriosos se pusieron a recordar en 1975, cuando el ministro de Salud Pública de entonces, planificó para el país una cobertura que llegaba hasta la medicina preventiva, igual que en el Primer Mundo. El Loro Miguel, por entonces al frente de la UOM y las 62, tuvo un soponcio y el cardiólogo famoso fue a pinchar culos, tomar la presión y poner chatas en un dispensario de Villa Echenagucia. Si va a suceder lo mismo o no, quién sabe, pero que todos son peronistas nadie lo puede negar, y a la vuelta la suerte de la gordita Graciela Ocaña pueden estar contados porque ya viene en la cuerda floja hace rato.
